un poema del tomi

Tomas Muller, el gran hacedor de historietas (A mario le gusta pulenta con pajaritos, me dijo que le dijera) le prestó a la sirena este hermoso poema, en un comentario de su blog. Le avisamos que se lo afanabamos. Y cumplimos. No es cierto que las sirenas no lloran, lloran abajo del mar y las lágrimas se confunden con el agua salada. Lloran porque muerden anzuelos y no tienen aleta dorsal para asomar a la superficie y asustar a los pescadores como hacen los tiburones. No es cierto que las sirenas no lloran, es mas, hasta hay gente que dice que el mar está hecho de lágrimas de miles de millones de sirenas.