Coño, joder. El mejor poema de amor: el tipo tenía una traga maluca que otra que la sirena.

Borges, con la tipa que amó, sin concretar niet.Estan en mi lugar karmico, la costanera sur

Todo el mundo sabe que Borges era un tipo jodido Bastaba verlo con su traje colgado, esa manera morosa de hablar, socarrona. Con esa madre terrible y despues Fanny, su ama de llaves. No la mejorò con la mujer que se lo llevo a morir lejos (Bioy dijo que Borges no queria) . Cuentan Caparros y Anguita (busque la referencia en la Voluntad, pero como dicen los pibes ahora "me da paja" ubicarla) que en el medio de los kilombos, de la facultad tomada, las clases abiertas en Letras, en ese entorno de la patria socialista, setentoso hasta la nausea (era setentoso porque eran los setenta) el quia le dictaba clase a tres o cuatro viejas estiradas, nadie lo escuchaba, era como un marciano en un banquete, desubicado total, hablando de sagas escandinavas y tigres mientras el mundo hacia plop (prometo buscar la cita)
La cuestion es que un comentarista de este blog, me decia que ya no le importaba la filiacion politica de alguien, especialmente si escribia de puta madre. El hombre en cuestión inclusive fue montonero. De verdad. (para mi que alguien me diga que fue montonero es como que me diga que fue soldado en la guerra contra el paraguay, porque soy una boluda con esas cosas, no se me pida lucidez: soy una sirena y tenemos que poner tanta energia para sobrevivir en tierra firme para respirar con nuestras branquias, para caminar con dos gambas si fuimos hechas para estar nadando en la mar salada.... que ofrecemos grandes agujeros en nuestros  mapas neuronales.
El chico ex montonero (nadie puede ser chico y montonero, ya lo se, no insista), por el que tengo una gran estima (nunca voy a poder arreglar mi metida de gamba, señor, a ud. le digo) me mando un poema de amor, que si a mi Borges me hubiera dedicado, no me hubiera importado irme a vivir con la madre, con fanny y la hubiera sacado a las  patadas a la hija de ponjas que se lo llevo a morir lejos.
Maravilloso poema de amor. Lo comparto con los corazones veleidosos que me acompañan en el sirenas, que son gente de sexo caliente, y de corazon generoso.

Lunas, marfiles, instrumentos, rosas,
lámparas y la línea de Durero,
las nueve cifras y el cambiante cero,
debo fingir que existen esas cosas.

Debo fingir que en el pasado fueron
Persépolis y Roma y que una arena
sutil midió la suerte de la almena
que los siglos de hierro deshicieron.

Debo fingir las armas y la pira
de la epopeya y los pesados mares
que roen de la tierra los pilares.

Debo fingir que hay otros. Es mentira.
Sólo tú eres. Tú, mi desventura
y mi ventura, inagotable y pura.