lo que me dice Fernanda.
La vida de mina grande me ha hecho, sin que nadie me ayudara, yo solita, rodearme de poetas.
Fernanda es amiga y tenemos confianza.
Estábamos comentando Tokio, de Patricio Foglia, con su pescador de pulpos y su esposa que espera, y traje a colación algo que yo había escrito de los kamikase, los aviadores japoneses que iban a sabiendas a la muerte.
Por esas casualidades que hacen de lo banal importancia,y por las coincidencias, las insistencias y sobre todo por como eso banal termina reverberando en el alma, ayer vi El imperio del Sol, la pelicula de Spilberg, en la tele.
Dura mucho, como dos horas y media: si tenes ese tiempo, mirala. Incluso está en youtube.La belleza derrapará como kero sobre tus ojos.
La cuestión es que japoneses.
Fernanda, mi amiga poeta, me dijo que Kamikase (mi texto) con algunos cortes, podría ser un poema. Ella lo dice, y yo lo hago.
Por el emperador, la vida.
Tendré la virtud de honrar a mis antepasados
y caerán bendiciones sobre Japón
Podre ver el celeste cielo
y al enemigo:
Siendo uno con él traeré la paz a mi pueblo.
El cielo sera rojo y caliente
no temblará mi mano ni la puntería de mi cuerpo
Acaso no importa esta vida de hoy.
Mi llanto es por Aiko,
a la que le prometí amor eterno,
pero lo eterno espera mas allá del fuego.
No defraudare a los que confian en mi
traeré la honra a mi padre
Él confía en que haré lo necesario
para asegurar que todo va a permanecer
tal como fue escrito.
Acabara la guerra
y Aiko seguirá esperándome
Mi valor es la mas preciada joya
con que puedo adornar su cabello.
Conozco el juramento, lo he aprendido de memoria,
tengo mi uniforme presto,
mientras anudo mi pañuelo en la frente
veo como en sueños
el barco que es mi objetivo
Soy uno con él, con su destrucciòn.
El té bulle en el agua –
Mi avión espera.Y el mar acuna a mi barco.
El viento sagrado sopla, y yo soy parte de ese viento
Soy kamikaze
Fernanda es amiga y tenemos confianza.
Estábamos comentando Tokio, de Patricio Foglia, con su pescador de pulpos y su esposa que espera, y traje a colación algo que yo había escrito de los kamikase, los aviadores japoneses que iban a sabiendas a la muerte.
Por esas casualidades que hacen de lo banal importancia,y por las coincidencias, las insistencias y sobre todo por como eso banal termina reverberando en el alma, ayer vi El imperio del Sol, la pelicula de Spilberg, en la tele.
Dura mucho, como dos horas y media: si tenes ese tiempo, mirala. Incluso está en youtube.La belleza derrapará como kero sobre tus ojos.
La cuestión es que japoneses.
Fernanda, mi amiga poeta, me dijo que Kamikase (mi texto) con algunos cortes, podría ser un poema. Ella lo dice, y yo lo hago.
Por el emperador, la vida.
Tendré la virtud de honrar a mis antepasados
y caerán bendiciones sobre Japón
Podre ver el celeste cielo
y al enemigo:
Siendo uno con él traeré la paz a mi pueblo.
El cielo sera rojo y caliente
no temblará mi mano ni la puntería de mi cuerpo
Acaso no importa esta vida de hoy.
Mi llanto es por Aiko,
a la que le prometí amor eterno,
pero lo eterno espera mas allá del fuego.
No defraudare a los que confian en mi
traeré la honra a mi padre
Él confía en que haré lo necesario
para asegurar que todo va a permanecer
tal como fue escrito.
Acabara la guerra
y Aiko seguirá esperándome
Mi valor es la mas preciada joya
con que puedo adornar su cabello.
Conozco el juramento, lo he aprendido de memoria,
tengo mi uniforme presto,
mientras anudo mi pañuelo en la frente
veo como en sueños
el barco que es mi objetivo
Soy uno con él, con su destrucciòn.
El té bulle en el agua –
Mi avión espera.Y el mar acuna a mi barco.
El viento sagrado sopla, y yo soy parte de ese viento
Soy kamikaze
Comentarios
¿Podrías haber escrito un poema bello como este? Tal vez. Pero este, no, es bello con la palabra kamicaze (viento salvador o algo por el estilo).
Los nipones son medio chiflados a los ojos occidentales, y sin embargo tan parecidos.
Ya que veo que Spinetta está iluminando tu sitio, recordá esta canción
https://www.youtube.com/watch?v=7GjSAkwc8eo&list=PL4CCE6272CA138176
Un beso!
El imperio del sol, la biografía de J. G. Ballard viviendo los últimos años del dominio inglés sobre China. Nunca vi la película, pero leí el libro hace bastante...
Y qué decir sobre la edad y la poesía... son partes de la vida, nada más.
Saludos
J.
Saludos!
J.