hace unos cuantos dias ando furiosa.
y los sucesos del dia a a día no me hacen mejorar el animo. He hablado de eso con mi amiga chaqueña Maria Marta, y con otras minas. No es lo mio. Pero hasta la cosa mas pelotuda me pone furiosa. Como no está en mi naturaleza, la reprimo y me siento miserable. Un buen remedio para las tripas es siempre escribir. Es un placebo, una droga milagrosa, una cura para el cancer. Ayer estaba en unas jornadas de salud mental de mis ex compañeras del espacio publico de Lomas, una de las comentadoras de un panel de laburos era mi analista. Mi analista es una mina terriblemente formada, una grande. En algun momento hablaron de que en la vejez o jugas o te deterioras. Yo creo que me deterioro (menos) porque escribo. Por ahi es una boludez pero lo pienso asi. Se que no soy una gran poeta ni nada que se le parece. pero escribo, hago el intento, miro que pienso y trato de ponerlo en palabras con mayor o menor fortuna. Como me he levantado furiosa y reprimo esa furia, como de mas. Y me vengo go...