infancia

 volvi al barrio y los viejos se habían muerto. Donde estaba la almacen de la paraguaya y al lado, justo donde había una casa abandonada desde que yo era niña, habian hecho un edificio bajo, de tres pisos, propiedad horizontal sin portero, y algunos departamentos todavia no habían sido vendidos. Los bebes de mi época habrian crecido y posiblemente esos dos que charlaban en la esquina yo los habría conocido de infantes pero ya no. El barrio olía distinto, y me afanaba en encontrar aquello en lo que habia abrevado de niño.

A poco entendí que los arboles eran los mismos,algunas casas habían mejorado el frente, otras seguian iguales pero diferentes, no se que buscaba allí, tal vez la alegria, el estupor, el arreglarme con nada,la confianza en que alguien proveeria cada una de mis necesidades, la fe.

Comentarios

JLO ha dicho que…
La melancolía y la nostalgia son así, que le vamos a hacer... uno de grande cae en eso y está muy bien el recordar las cosas lindas, por qué no! saludos
vodka ha dicho que…
no tengo nostalgias por mi barrio porque no me mude de manzana nunca.
Tengo nostalgias peores,las de cosas que no pasaron,como mudarme.
Marcelo, el gaucho ha dicho que…
Conservamos los mejores recuerdos de nuestra infancia y juventud, y descartamos los malos para reconstruir una felicidad que no fue tal: cuando fuimos jóvenes nos dolían cosas que hoy nos dan risa, pero cómo nos dolían. Y también una felicidad infantil hecha de ignorancias, porque los pibes no ven el sufrimiento ajeno, no ven el auto que estuvo a diez centímetros de atropellarlos, no ven al perro agonizando durante días.

Y cuando volvemos al lugar donde vivimos esa supuesta felicidad casi todo ha cambiado: lo poco que se conserva como era entonces ya no significa lo mismo para nosotros, y lo horrible que no veíamos nos golpea los ojos.

Cuando se muera alguno de mis tíos de Pergamino me iré derecho al cementerio, y de ahí de vuelta a casa. No me merezco el sufrimiento de ver cómo es realmente ese barrio que quise tanto.

Abrazos.
José A. García ha dicho que…
Creo que diste en el punto exacto cuando mencionaste el olor. Cuando el olor del barrio cambia ya no es nuestro barrio. Sólo nos quedan los recuerdos.

Saludos,

J.
Frodo ha dicho que…
Me gustó tu comentario de que viviste en la misma manzana siempre, pero sabemos que NO es la misma que la de la infancia. Ya lo dijo el conejo:para estar en el mismo lugar hay que correr muy rápido

¡Qué hermoso tango, por favor!
Cada vez que voy a visitar a mis viejos algo diferente encuentro.

Entradas populares de este blog

refranes

ud. piensa que es poco atractiva? : la teoría de Barney